Así lo explicó el diputado popular Josep Maria Fabregat tras la reunión de la ponencia, en la que CiU reiteró que se opone a la segregación, mientras que ERC, que en este tema tiene la llave para que salga o no adelante el cambio legal, no se pronunció.
Fabregat mencionó la consulta popular que organizó la pedanía de la población el pasado día 26, en la que los vecinos que votaron se pronunciaron masivamente en contra de la segregación. No obstante, Fabregat recordó que el proceso de la consulta popular fue irregular, tal como mantienen los promotores de la segregación, que invitaron a los vecinos a no acudir al referéndum al considerar también que era irregular.
Por otra parte, la conselleria de Governació entregó a los diputados de la ponencia dos documentos de diferentes organismeos que han emitido informes desfavorables sobre la segregación. El primero de ellos es el de la comisión de delimitación territorial de Catalunya y el segundo de la comisión jurídico-asesora de la Generalitat. Este último informe recuerda que la ley prohíbe la segregación de pueblos si no tienen un mínimo de 2.000 habitantes, tal como aprobó el Parlament hace unos dos años. Arties e Garòs no llegan a los 2.000 habitantes.
No obstante, el PSC y el PP quieren ahora introducir una excepción al artículo que hace referencia a este mínimo de población y hacer mención explícita al caso de Arties e Garòs, cuyo expediente de segregación se inició hace más de diez años.
No obstante, la conselleria de Governació ha dejado el tema en manos del Parlament y, por tanto, la llave la tiene ERC. La formación republicana se abstuvo el día en que se acordó tomar en consideración la propuesta de segregación, con lo que CiU, que rechaza tajantemente la separación, perdió la votación. PSC y PP intentarán ahora convencer a ERC para que no vote junto a CiU.
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